Conociendo a Florencia Pereiro

En Pasión Arrabalera te contamos como es la vida de las jugadoras que juegan por amor propio. En esta ocasión hablamos con Florencia Pereiro que, además del fútbol, tiene otra faceta: la actuación. De los escenarios a la cancha, de los vestuarios a los camarines. Disfruta de esta nota con “La China” contada desde su otra pasión.

Sus inicios en el teatro

Estudio teatro hace muchos años y nunca lo voy a dejar, empecé cuando tenía ocho. Estudiaba con Lito Cruz en el Teatro de La Ribera en La Boca, después me fui con Virginia Lago. Estuve cinco años con ella y dos con Lito. Dejé de cursar hace poco pero hacemos funciones en un ciclo de obras cortas que se llama Perfecta Anarquía.

El apoyo de su familia

Mi abuela siempre me llevó a todos lados, me llevaba a las clases porque salía muy tarde y era chica. Vivía en Lanús. Cuando salía del colegio también me iba a buscar. En las muestras siempre venía toda mi familia. Con mi tío tenía una relación muy pegada y él era representante de actores, siempre le decía que quería ser actriz. Al principio mucho no le cabía porque conoce como es todo el movimiento. Siempre me dijo que estudie. Te frustra un montón, muchas veces volvía a mi casa diciendo que no iba a estudiar más. Mi prima también estudia teatro y a ella le está pasando lo que me pasó siempre, le dije que lo va a empezar a disfrutar cuando lo tome como un placer, del teatro no vivís, es muy complejo. Hoy digo que no dejo teatro por nada en el mundo. Me subo a un escenario y soy otra persona, no lo puedo creer ni yo.

¿Tenes cábalas para subir al escenario? ¿Cómo te sacas los nervios?

Para el teatro no tengo cábalas pero para el futbol soy re cabulera. Algunas cosas que son básicas: no ponerme algo amarillo o no barrer el camarín. Uso mucho el amarillo encima pero me lo saco por respeto. Trabajo mucho con la respiración, estiro el cuerpo. No me da nervios hasta que estoy en escena y entra la gente. Es complejo concentrarte cuando sentís los pasos de la gente que entra. Una vez fueron mis hermanos y los escuchaba diciendo “ahí está la China”. Lo que hago, y que siempre se rien mucho, es cantar una canción por dentro, la única manera que tengo de concentración hasta hoy en día es cantándola.

¿Por qué empezaste a hacer teatro?

Era payasa, hacía muchas maldades, un día quemé a mi hermano más chico con un tenedor porque me estaba molestando. Sola empecé a ir, mi hermana Natalia había estudiado y mi tío nos llevaba al teatro cuando éramos chicas. Siempre soñé con ser actriz, no tanto de televisión, sino de teatro. Cuando iba me quería subir del escenario. Mi tío me recomendaba donde ir a estudiar según las etapas. Una de mis metas es hacer cine.

¿Televisión o Teatro?

Prefiero teatro sin dudas. Generas un montón de sensaciones que ves y recibís que la tele no te las da. En la tele si grabas y sale mal se hace de nuevo. Todas las funciones van a salir diferentes en el teatro y generas sensaciones diferentes. Me ha pasado de hacer escenas, salir y que alguien me diga una cosa y otra persona algo totalmente diferente. Aunque sea la misma escena cada uno recibe algo diferente. Eso en la televisión no lo ves. Nunca hago el texto al pie de la letra, no sale natural sino.

¿Te gustaría dirigir alguna obra?

Me dio un poco de libertad estos últimos años que nos hicieron escribir y dirigir obras de nuestros compañeros. Los mismos compañeros te llaman para que los ayudes a hacer algo. Igualmente no me lanzaría a dirigir algo porque me gustaría estar arriba del escenario.

Su futuro como actriz

Es muy complejo vivir de la actuación y del teatro. Tengo amigos que son actores conocidos y no viven del teatro y tienen que estar buscando alguna changa para hacer mientras encuentran algo en televisión que junto con la publicidad y el cine es lo único que rinde económicamente. El teatro se hace más por placer, gusto y pasión. Me veo formándome todavía porque hay muchos puntos de vista diferentes, pero me gustaría hacer un proyecto de obras cortas, hay un montón de talentos que se pueden explotar. Tengo en mente varias cosas que ojalá en algún momento las pueda hacer.

El cine

Me gustaría hacer en algún momento, quiero actuar. Cuando estaba estudiando cine, hice una pasantía en una productora de televisión. Mi tío me decía: “¿vos queres estar delante de las cámaras o queres estar atrás?”, y que era muy duro estar atrás y ver cómo actúan si yo lo que quería era actuar. Sabía que por más que estudie teatro algo tenía que hacer, era un hobbie más que una carrera profesional. Pensas que estás más cerca pero en realidad estás en la otra punta.

Fútbol y teatro

Para mí en algunas cosas se complementan, para el actor la voz y el cuerpo son el arma de trabajo. Corporalmente en teatro tengo mucho dinamismo, ahí le veo una similitud con lo deportivo. También he inventado alguna caída. Vivo a mil con el fútbol y el teatro, ni como a veces. Siempre buscaba espacios y lugares para hacer las cosas que más me gustan. Nunca deje nada y traté de hacer siempre todo

¿Alguna vez pensaste en dejar alguna de las dos?

Si, mil veces me pasó. La más fuerte fue cuando terminamos en Boca, que fue el año más sentido a nivel jugadora y cómo me había involucrado en el club siendo hincha de River. Se me había caído todo lo que habíamos hecho, estaba muy dolida por eso y por muchas otras cuestiones que pasaron que eran más humanas que deportivas. Hasta que me di cuenta de que lo que no te mata te fortalece y que teníamos la chance de hacer algo mucho más grande.